sábado, 15 de diciembre de 2007

Eagles, el sonido de California


Los Eagles se han convertido en uno de los grupos americanos más importantes dentro del country rock. Con más de treinta años en el negocio, Don Henley, Glenn Frey, Timtohy B. Schmit y Joe Walsh, sin olvidar a Bernie Leadon, Randy Meisner y Don Felder, se han erigido en líderes de un particular y personal estilo que radica en sugerentes planteamientos acústicos, efectivas voces y una buena dosis de rock & roll. Con tan sólo siete álbumes de estudio, y para que te hagas una idea de las cifras, los Eagles han vendido más de 80 millones de discos, han obtenido varios números uno en las listas americanas y todos los premios de la industria discográfica que se pueden conseguir (a finales de 2004, habían conseguido 27,3 millones de dólares de ganancias en actuaciones y ventas de discos), convirtiéndose en un icono de referencia para muchos cantautores y grupos de la nueva generación de aquel tipo de música, la llamada "americana", pero ahora Take It Easy (Tomátelo con calma), pide un Tequila Sunrise, comienza a leer esta monografía y entérate de la vida en la senda rápida y peligrosa (Life In The Fast Lane) que eligieron estos cow-boys desesperados.

Paul McCartney, el día a día de un fabricante de melodías




El origen del libro que tienes en las manos se remonta a muchos años atrás, cuando a finales de agosto de 1980, al término de unas vacaciones que disfrutamos mi esposa Ana y yo en Lon­dres, me hice el firme propósito de escribir acerca de mi ex beatle preferi­do: Paul McCartney.
Naturalmente, y como buenos amantes de la música, ni que decir tiene que aquella visita a la ciudad del Támesis fue de lo más gratificante. En aquel paraíso sonoro, y con el seductor recuerdo que conservaba del álbum de los Wings, London Town -que se convirtió durante buena parte de 1978 en mi disco de cabecera, mientras prestaba el servicio militar-, rebusqué en varios centros especializados hasta que encontré el libro de partituras para guitarra del disco homónimo; incluso adquirí algún que otro vinilo de McCartney y de los Beatles que faltaba en mi colección.
También me sentí fascinado por la gran dimensión histórico-musical de una urbe como Londres. Dadas las circunstancias del éxito obtenido por los Beatles a lo largo y ancho de este mundo, no es de extrañar entonces que exista un rincón de esta ciudad -a semejanza de Liverpool que cuenta con la ilustre condición de tener entre sus hijos predilectos, a cuatro perso­nalidades que revolucionaron el mundo de la músicapop- que no haya sido husmeado por la legión de enfervorizados fans que se enorgullecen de ha­ber tocado y deambulado por el suelo que un día pisaron, Paul, John, George y Ringo.
Sin embargo, la escena musical británica, y en concreto, la de Londres, había cambiado ostensiblemente: elpunk todavía persistía -al menos en lo que se refiere a la estética de cientos de jóvenes- en muchos de sus barrios; y canciones de grupos como Pretenders, Pólice y Blondie, líderes de la imperante -por aquellos días- new wave, sonaban por doquier. Pero, me alegró comprobar in situ que la balada "Waterfalls", uno de los mejores temas del por entonces recién editado -apareció en mayo de ese año- nuevo álbum de Paul, McCartney II, también se oía en muchos de los estableci­mientos especializados de aquella ciudad.
Cuando volvimos a Barcelona, y tal como citaba al principio de esta introducción, empecé a poner orden en mi inmenso archivo de artículos y recortes de McCartney, a la vez que meditaba la posibilidad de escribir un libro sobre su fructífera trayectoria. El destino inexorable cambiaría mis planes.
En diciembre de ese año, una inesperada y fatídica noticia me sacudió de manera similar a como lo hizo en millones de personas: John Lennon había sido asesinado por un desequilibrado.
Mientras que fallecía uno de los artistas que más luchó por la paz y el desarme mundial, la Beatlemanía resurgía aferrándose a coetáneos y nue­vas generaciones. Así que mi proyecto original de escribir sobre McCartney, se convirtió en un libro homenaje a los Beatles, que por primera vez en España, compilaba también las trayectorias en solitario de Paul, John, George y Ringo.A finales de la década de los 80, y buena parte de los 90, otras tendencias musicales me apartaron del propósito de escribir el libro sobre Paul; si bien, seguí muy de cerca cada uno de los pasos que iba efectuando este fabricante de melodías. De tal forma que, en 1997, su estupendo álbum, Flaming Pie, me devolvió la inspiración para retomar de nuevo la idea de escribir sobre el Macea. De cualquier manera, lo que sí que desestimé es que mi libro se convirtiera en la típica biografía al uso -lo que me habría ocupado más de mil páginas, ante la prolífica actividad de este gran músico, al que un día se le llegó a denominar el Mozart del siglo xx- complementada después con un sinfín de apéndices: discografía completa, videografía, colaboraciones, y un largo etcétera. Por lo tanto, me propuse que todo, absolutamente todo, lo incluiría en un diario cronológico que (exceptuando el primer capítulo que nos sitúa a Paul desde su fecha de nacimiento, hasta los albores de su éxito en compañía de John, George y Ringo) también comprendería las referencias de sus discos, rarezas, y participaciones con otros artistas; sin olvidar su etapa crucial con los Beatles, porque de esta forma, la exposición de fechas en su vida, nos sitúa mucho mejor al artista en una cronología completa y organizada en su propia progresión. En tales circunstancias, también me gustaría aclarar que no pretendo tan sólo demostrar su talento -incuestionable-, sino simplemente exponer los hechos tal y como se han producido en la prolífica profesión de este gran fabricante de melodías; y ante todo, he asumido la tarea intentando ser crítico, pues no todo lo que ha compuesto McCartney ha revolucionado a sus millones de incondicio­nales: como músico, tiene muchas cosas interesantes y otras no tanto


Por primera vez, me propuse también analizar sus textos -aparte de ser juez en sus trabajos- intentando reflejar qué es lo que éste músico universal quiere decir en sus canciones. Amigo lector: si lo he conseguido, ésta era una de las premisas más importantes con las que encaré este nuevo trabajo.
Por otro lado, cabe recordar -a pesar de que es de dominio público- que aunque Paul y John firmaron sus canciones en comandita, he reseñado con un asterisco cada uno de los temas compuestos en su totalidad por Paul, para que las nuevas generaciones que van descubriendo el sugestivo mun­do de los Beatles, conozca el material que se debe exclusivamente a la magia compositora de este músico universal.
Por último, me gustaría añadir que hay dos cualidades de Paul que siem­pre me han fascinado y que creo son muy importantes para todos los segui­dores del cuarteto de Liverpool, a saber: su indiscutible versatilidad, y esa gran capacidad para mantener viva -día a día- la leyenda de uno de los me­jores grupos de la historia de la música rock: los Beatles.

Joan Manuel Serrat




Se supone que la introducción de un libro se escribe para aclarar el motivo principal del mismo. En este caso la explicación es evidente y natural: profundizar en la excelente y prolífica obra de Joan Manuel Serrat. El lec­tor también hallará un Semblante biográfico rigurosamente documenta­do, en el que se recogen más de veinticinco años de la carrera artística del «noi» del Poblé Sec. Desde que Serrat irrumpiera como aire nuevo en el movimiento de la Nova Canco, acompañado de un puñado de emotivas canciones, crítica y público mantienen sus elogios cada vez que éste publi­ca un nuevo disco en el mercado. ¿De qué extraña dádiva está dotado este catalán universal para seguir fascinando a la concurrencia? Quizá su ma­yor acierto como cantautor y poeta, reside, a mi modo de ver, en esa peculiar configuración para erizar la piel del oyente, transmitiendo agradables sen­saciones con esa efusión que su garganta desprende. Serrat le canta a la naturaleza, al amor, a los niños, a los mayores y a los poetas. Denuncia los problemas sociales, las injusticias y a los opresores, con una honradez más que deseable. Sin embargo, nos encontramos con dos cuestiones fijas en la narrativa musical de Joan Manuel: la infancia y la adolescencia como una edad prodigiosa e irrepetible a la que todo hombre adulto —yo también me incluyo-, desalentado por los tiempos que corren, anhela perpetua­mente regresar. Y por otro lado, la preocupación por las graves catástrofes ecológicas —que según síntomas recientes tienden a empeorar— que el hombre -falto de sentido común— podría evitar. Nuestro mar está sucum­biendo día a día en una inmensa y pastosa marea negra; y en muchos pun­tos del globo en los que hasta hace muy poco tiempo los rayos del sol se dibujaban en el verde y transparente mar, ahora predominan paisajes desérticos y fantasmales. ¿Vivimos tiempos insensibles a las tareas de mante­nimiento de la natura? ¿No es cruel advertir nuestro Mar Mediterráneo convertido en un 'Mare Porcum'? En cualquier caso ocurre que aquel mu­chacho que un día le cantó con alegría a su mar, ahora, consciente de un drama anunciado, le llora con sentimiento: Miradlo hecho una alcantarilla, herido de muerte.I Cuánta abundancia,! cuánta belleza,! cuánta energía (¡ay, quién lo diría!)/ echada a perder./ Por ignorancia, por imprudencia,/por in­consciencia y por mala leche*. Es sorprendente comprobar la habilidad —quizá se podría hablar de maestría— con la que Serrat potencia su capaci­dad de atracción a la hora de narrar en sus canciones los buenos y malos conceptos de la vida, con la única ayuda del lenguaje. Pero no crea el lector que la inspiración se le presenta de improviso al cantautor. El proceso que aplica Joan Manuel para componer sus temas es amplio y esmerado; para ello se ayuda del diccionario y de su hermano pequeño: el léxico de sinó­nimos; ya que en el sugestivo terreno del idioma patrio, el seguir obteniendo nociones que toda persona necesita -incluso el más sabio lo hace-, enno­blece la propia cultura. Es por eso quizá que los textos de Joan Manuel Serrat sobresalen del actual panorama musical; en el que las cuestiones de provecho en el mensaje de las canciones, brillan por su ausencia.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Elton John





Tras quince años de continuos éxitos musicales. Elton John es hoy una de las estrellas más brillantes en el incierto mundo del rock. Compositor e intérprete magistral al piano, dotado de una voz excepcional, ha sabido bordar sus hermosas melodías con los magníficos textos del poeta Bernie Taupin, logrando para su obra el máximo reconocimiento y cotización en cualquier rincón del mundo.
Tímido, extravagante y miope, ha superado todos sus complejos tras sus originales modelos de gafas y vestimenta, convirtiéndose en el músico más excéntrico del show-business, el primer artista del pop occidental capaz de provocar el delirio entre moscovitas y yanquis.
Una gran cantidad de anécdotas a lo largo de su biografía, y la más completa relación de sus grabaciones (discos oficiales, piratas, colaboraciones, videos, etc.,. hacen de este libro el estudio más profundo realizado hasta la fecha en España sobre este gran ''fenómeno" musical llamado Elton John.

David Bowie, el hombre de las mil caras












Fue en la primavera de 1972, una mañana de domingo (como muchos), nos encontrábamos escuchando la radio, mi amigo Francis y yo; un locutor pinchaba los éxitos del momento con sus habituales anécdotas, detalles y, de repente, anunció una inesperada novedad: "... David Bowie, ese señor o señora que canta rodeado de flores, y aderezado con una imagen que está llevando de cabeza a toda Gran Bretaña..."
Los comentarios radiofónicos eran los típicos de aquel año, tratándose de uno de los personajes más polémicos surgido en la corriente estético-musical del Glamour-rock en el Reino Unido. David Bowie hacía bastantes meses que venía apareciendo en las revistas musicales, aunque, aquí, en España, no se le conocía. El tema que escuchamos aquella mañana era "Starman" ("Hombre Estrella"), una canción preciosista, cósmica y con una aureola acústica sorprendente. Este era el primer single de Bowie editado en nuestro país, y algunos se llegaron a preguntar si se iniciaba su singladura musical aquel mismo 1972; pero no, sus primeros escarceos se remontaban a 1 965 y, desde entonces, su música e imagen han venido coloreando mil escenas diferentes en su país natal y en el resto del mundo.
Los músicos británicos, al igual que Bowie, han sabido recoger, como sus antecesores, los "Beatles" y "Rolling Stones", las mejores esencias de la música negra americana y de cualquier parte del globo, para luego, crear, día a día, un pop fresco, innovador y, sobre todo, muy comercial. David Bowie copió de todo lo que le rodeaba, y llegó a erigirse como uno de
los reyes del Glamour-rock o Gay-power, historia inventada por su amigo Marc Bolán (líder de "T. Rex"), en 1 970 llevándola mucho más lejos, provocativamente, y con unos resultados realmente espectaculares.
A principio de la década de los 80, después de haber dejado de lado las lentejuelas y el carmín, y tras una larga etapa de música experimental, Bowie se nos presenta todavía sumergido en las raíces de "color", ofreciéndonos su potente y linda música, arropado por los mejores instrumentistas. "Lets dance" y "Serious Moonlight Tour 1983", fueron la confirmación plena de que Bowie, actualmente, es uno de los mejores espectáculos del mundo.
Recientemente, Bowie se ha marcado otro tanto con la publicación de su última obra, "Tonight", acompañada por el hit en single, "Blue Jean", que nos devuelve al Bowie de temas comerciales, pero no exentos de rock, como en ''Je Genie", "Rebel Rebel" o "Diamond Dogs".
Siguiendo la costumbre implantada hace pocos años acompañarse por algún famoso, Bowie ha recurrido a la vocal de Tina Turner en uno de los temas más interesantes de este álbum, "Tonight", que a la vez le da título. Sir Elton John pidió la armónica de Stevie Wonder para su excelente "I guess that's why they call it the Blues", Paul McCartney se peleó vocalmente en un acaramelado dueto con Michel Jackson en su "The Girl is Mine", y Mick Jagger vozarreó a los "Jacksons" en "State of Shock". Bowie no iba a ser menos, y se marca un reggae alimentado por la pasión vocal de Tina.
Peínate el pelo de punta, pídele prestado un poco de maquillaje a tu hermana o a quien quieras, siéntate en un cómodo sillón, y ponte a leer la verdadera historia de David Bowie pero, por favor, es imprescindible que pongas en tu tocadisco el "Ziggy Stardust & the Spiders from Mars" a todo volumen.

Beatles, ayer, hoy y siempre (Fecha de publicación: Julio de 1983)























Queda muy lejano aquel 5 de Octubre de 1962, fecha en la cual los Beatles, entraban por primera vez en un estudio de grabación, hoy, tras veinte años, el mundo sigue escuchando sus discos, los cuales se revalorizan día a día.
Y todavía se sigue escribiendo acerca de ellos, porque tan sólo los Beatles han conseguido ser el mayor fenómeno social de todos los tiempos.
Existe una gran variedad de libros contando la vida de nuestros queridos Beatles, todos ellos muy interesantes. El pretender escribir uno más, es una ardua tarea, por el simple hecho de... ¿Qué se puede decir de ellos, que no se haya escrito ya?.
A cada momento van apareciendo nuevos secretos y anécdotas que han logrado hacer posible la historia de John, George, Paul y Ringo... tanto juntos, como por separado.
Miles y miles de «fans» y de estudiosos del grupo se han dedicado a indagar, intentando encontrar algo nuevo.
En el transcurso de este libro que tienes en tus manos, hallarás datos que ya sabías, pero a la vez conocerás otros, siendo este uno de los motivos principales de mi obra, unido al de ofrecer un homenaje a uno de los cuatro tristemente desaparecido: John Lennon, asesinado por un demente en diciembre de 1980. En realidad cuando Lennon hacía diez años que los Beatles habían acabado como grupo y en ese mismo año en que el triste destino nos deparó.
Lennon volvió a grabar junto a Yoko, dándose el caso, bastante curioso, de que grabaran un tema denominado "Starting over» (Como si volviésemos a empezar).
La biografía de los Beatles no se puede intentar cambiarla. Últimamente y en conmemoración del 20° Aniversario de la canción «Love me do», están apareciendo una serie de libros y revistas, dedicadas a revivir su historia.
Estamos de acuerdo que hoy día, la música ha cambiado enormemente, pero los Beatles serán imperecederos.
La verdad de los Beatles sólo tiene un camino: el contarla tal como sucedió.
Mi propósito, con este libro, es el de contar su biografía rápida, sin dejar las anécdotas más importantes y dar un repaso a la obra que nos dejaron, sus grabaciones, temas inéditos, sus películas, sus actuaciones, etc. etc.
Pero no te entretengo ni un segundo más, da la vuelta a la página y viaja a través de la década dorada de los Beatles.

50 éxitos de Beatles para guitarra fácil



Todo lo que se pueda decir de los Beatles, se ha tratado en innumerables libros, miles de articulistas han escrito todo lo que se podía saber de ellos. Todos conocen su obra, sus ajetreos musicales y personales, y al volver a hablar de ellos, uno, no deja de sentirse nostálgico, ¿Quién no ha tarareado alguna vez Yesterday...?
«Love me do», «Can't buy my love», «A hard day's night», «Hey Jude», etc. Son canciones que han dado la vuelta al mundo y la seguirán dando, mientras exista el monopolio en torno a los Beatles.
Unos muchachos que provenían de ambientes obreros y que, de la noche a la mañana, se hicieron los amos de la música pop. Su vida llena de giras, grabaciones, películas, líos, drogas, «meditaciones», y, como no, dinero, y en cantidades masivas. Pero lo que no sabrán muchos de sus incondicionales, es que dentro del mundo insólito del coleccionismo en torno a ellos, hay anécdotas curiosas: Son muchas las fans que dedican su vida a buscar la versión de «All my loving» que empieza con unos redobles de batería y unos discos japoneses en los que hay unas versiones estereofónicas de «Penny Lañe» y «Hey Jude», que son una maravilla. Y también corre por el mercado pirata un long play titulado «The Beatles live in Italy», y la versión original de «Yesterday & Today» (En la portada, los cuatro sonríen después de haber despedazado unas muñecas. La Capítol reemplazó la foto a toda prisa), y por último, para no hacer más larga esta lista de rarezas Beatlerianas, el single cantado en alemán.
Sus comienzos fueron una lucha titánica por conseguir los primeros puestos en las listas, les seguían de cerca los Rolling Stones. Unos se burlaban de los otros, los Beatles lanzaron su «Let it be» (Déjalo así) y los Rolling a la semana, un desafiante «Let it bleed» (Déjalo sangrar).
En Diciembre de 1970, Paul pide judicialmente la disolución de los Beatles. Ringo se dedicó a sus filmaciones y discos dentro de una línea muy «Camp», John a crear, junto a su mujer Yoko Ono, bandas y música protesta. George a meditar con el Maharishi y su «Haré Krishna». Y Paul, por último, a darnos baladas agradables al oído y que le han dado millones y millones. Hoy día, los cuatro por separado, se han prodigado en producciones discográ-ficas, y el monopolio antes citado va explotando el fenómeno Beatles. Juntos o separados no dejan de ser «nuestros Beatles».
En las manos tenéis la cadencia de sus mejores canciones. No esperes más y toma tu guitarra. Todos esperan escucharte.

Supertramp, el grupo del Siglo



Supertramp se inició en 1970 en Londres, de la mano de Richard Davies que se puso en contacto con Roger Hodgson, Richard Palmer y Bob Millar.
Un extraño millonario holandés afincado en Ginebra prestó su apoyo económico a Rick, pero sus dos primeros long-plays, "Supertramp" y "Indelibly Stamped" no tuvieron mucha aceptación entre el público, que no veía absolutamente nada en ellos, y, por consiguiente, el millonario se esfumó y no se supo nada más de él.
A finales de 1973, Supertramp había cambiado de formación: Bob C. Benberg a la batería, Dougie Thompson al bajo, John Anthony Helliwell a los saxos, clarinetes y voces, más Richard Davies a los teclados y voz, y Roger Hodgson en guitarras teclados y voz solista.
Se reunieron en una casa de campo en el año 1974 y con la ayuda del productor Ken Scott graban su "Masterpiece" titulado "Crime of the Century" que les alza a la fama y superventas. Las canciones claves del disco son, por orden:
"School" (cuyo sólo de piano ya es célebre); "Rudy", la historia de la jovencita melancólica, y "Crime of the Century".
Se suceden giras repletas de éxito y el cartelito de "sold out" en el Victoria Palace de Londres.
En el verano del año 1975, en Los Angeles, graban "Crisis? What Crisis?", obra mordaz y satírica surgida de las ideas de Davies, lo que logra que siga la fama del anterior alcanzando altas cotas de popularidad. "Sister Moonshine", "The Meaning" y "Another Man's Woman" son títulos a destacar del plástico. Siguen unas vacaciones en California y el siguiente álbum lo terminan en la primavera de 1977 en Caribou Estudios. Tras dicha grabación, "Even in the Quietest Moments", se lanzaron a un ambicioso "tour" de 80 actuaciones presenciadas por no menos de 400.000 personas.
En Junio del mismo año es Disco de Oro en U.S.A., junto al "Crime of the Century". "Give a Little Bit" es un tema sencillo, (dame un poco de tu amor y te daré un poco del mío), luego está el delicioso "Even in the Quietest Moments" y el fabuloso "Babají" de significado religioso y "Fool's Overture" canción que salió principalmente de unas cuantas melodías que Roger había hecho con sintetizador. El tema fue fruto de un año de trabajo y John Anthony lo define como "Sophisto-Rock".
El 26 de Septiembre del mismo año vuelan a Barcelona donde les esperan enfervorizadas fans, niños-as, mamas, ejecutivos, pijos, etc. etc. Hasta a mis padres les gusta. Y es que sus tonadillas son de las que se silban.
Nuestros amigos se lo montan todo muy bien y, casi diría yo, en plan familiar, porque, desde el conductor que los lleva hasta el ingeniero, todos cobran igual. ¿Qué? ¿Te extraña? Pues así es. Aunque parezca imposible ellos lo reparten todo por igual. Tanto en estudio como en escena Hodgson usa una Pender Stratocaster, una Gibson Les Paul, una Rickenbaker de doce cuerdas y una Pender acústica de doce cuerdas. Davies, un piano de los grandes: Helpinstill Pick-up, un Wurlitzer, un Mini-Moog, un Hammond B3, dos Leslies y un Elka and Arp String.
El batería Benberg, una Ludwing con timbales Gretsch/Slingerland y Paiste, junto con otras percusiones variadas.
Thompson, el bajista, usa un Pender Precisión, Pender Jazz y un Rickenbaker. Anthony Helliwell se encarga de los siguientes instrumentos de viento: Le Blanc Alto, Rene Gounor Soprano, Selmer Mark VI Tenor, Conn Barítono, Yamaha Flauta, Selmer Bajo Clarinete, Fíat Clarinete y un Buffet B.
Con semejante instrumental y con la maestría con que tocan se pueden hacer auténticas maravillas.
1978 empezó para el grupo con más giras, y, entre una y otra recogida de Discos de Oro y Platino, se ponen a grabar "Breakfast in America" el cual se lo zampan, como desayuno, millones de adictos de Supertramp en 1979.
Y ese mismo año concretamente, otra gira monstruosa que acaba en Noviembre en Barcelona y Madrid. Sí amigos, y valga la redundancia, los cinco de "Supertramp" estuvieron ya dos veces en Barcelona y Madrid con su "INDELEBLE ESTAMPA"
y de no ser así, hubiera sido el "CRIMEN DEL SIGLO" para sus seguidores, que no son pocos, y muchos de ellos no paran de preguntarse: "¿CRISIS?", ¿QUE CRISIS puede tener este grupo, cuando su material de luces y sonido se traslada en seis trailers?". En sus conciertos resaltan una inmensa mesa de mezclas que procesa gracias a una computadora. Es entonces, "INCLUSO EN LOS MOMENTOS MAS TRANQUILOS" cuando más nos llama la atención el escuchar cualquiera de sus obras, y mientras nosotros les escuchamos, los SUPERVAGABUNDOS" (Supertramp) se dan el suculento "DESAYUNO EN AMERICA".
Bueno, eso es todo. Os dejo que se me están quemando las tostadas.